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martes, 18 de marzo de 2014

"Orden en el congelador, clave para la seguridad de los alimentos."

La congelación permite conservar alimentos durante periodos más o menos largo de tiempo. Si se congelan productos de calidad, y estos se descongelan de forma correcta, se mantendrán las propiedades hasta el momento de su consumo. Pero para ello, un almacenamiento adecuado de los alimentos en el congelador que incluye la organización y supervisión periódica de los mismos es esencial. Como en el caso de la despensa y la nevera, los alimentos que se tenga intención de congelar deben rotarse para asegurarse de que los que se han congelado primero son los que salen también antes. El artículo explica cómo organizar el congelador y cómo mantenerlo limpio.


Con la congelación, el agua de los alimentos se convierte en hielo. El almacenamiento de los alimentos a temperaturas de congelación (-18 ºC es la temperatura en la que la proliferación de bacterias es casi imposible) hace que bacterias o mohos que puedan estar presentes en los alimentos queden inactivados. Pero debe tenerse en cuenta que, a pesar de que la congelación detiene el metabolismo de los microorganismos, no los elimina, por tanto, el frío no es un factor higienizante como puede ser el calor intenso


Para que la congelación sea efectiva, es aconsejable que se realice de forma rápida; de esta manera, se evita la migración de patógenos del exterior al interior del alimento. También es importante evitar la fluctuación de temperatura, es decir, respetar la cadena de frío, para impedir la proliferación de microorganismos. La seguridad de los alimentos queda garantizada con la congelación, salvo que no se hayan evitado los cambios de temperatura.


Cómo organizar el congelador


Tener un congelador ordenado y limpio es una de las principales formas de mantener los alimentos más seguros. Es importante no descuidarlo y evitar tenerlo como simple almacén en el que se van introduciendo productos sin control alguno.

  • La bandeja de congelación es adecuada para las cubiteras y otros productos pequeños planos.
  • En el primer cajón pueden almacenarse los productos que se deben consumir más a corto plazo, ya que es el más accesible.
  • En los cajones inferiores podrán guardarse los alimentos con una previsión de consumo más larga.
  • Deben utilizarse bolsas o recipientes herméticos para evitar que se deshidraten los alimentos.
  • Poner una etiqueta con el nombre del alimento y la fecha de congelación, de manera que se pueda leer de forma fácil.
  • Agrupar los alimentos por grupos: pescados, carnes, aves o verduras.
  • Congelar en raciones o cantidades que se calculan que serán las que se consumirán. (Esto permitirá descongelar sólo el volumen de alimento que vayamos a utilizar).
  • Los alimentos ya cocinados han de introducirse en un recipiente hermético una vez estén enfriados. Si se introducen calientes, puede ponerse en riesgo el resto de alimentos congelados.
  • Es importante impedir que se forme hielo en las paredes del congelador, ya que se impide la correcta transmisión del frío, con los consecuentes efectos negativos en los alimentos. Para ello, la puerta se abrirá solo lo necesario y se comprobará que las gomas están en buen estado. De este modo, se evita la entrada de aire en el interior y la formación de hielo.
  • Debe revisarse el congelador de manera periódica para eliminar posibles alimentos que hayan podido estropearse.

A pesar de que los tiempos de conservación varían en función de la calidad del alimento, el pescado puede conservarse congelado entre tres (3) y seis (6) meses; las frutas y verduras, de seis (6) a doce (12) meses; la carne de ave o cerdo, unos seis (6) meses; y los alimentos cocinados, de tres (3) a seis (6) meses.

La organización de alimentos descrita sirve para todo tipo de congeladores, tanto los que tienen los cajones debajo de la nevera, como si se trata de congeladores verticales o arcones. En este último caso, es importante colocar los alimentos en recipientes herméticos de fácil acceso, realizando una rotación de alimentos para impedir que se acumulen durante mucho tiempo. En este tipo de congeladores, puesto que cabe mayor cantidad de alimentos, pueden crearse compartimentos para dividir y organizar mejor los alimentos, ya que hay un mayor riesgo de que se vayan acumulando.


Cómo mantener limpio el congelador



Tanto el congelador, como la nevera, deben descongelarse y limpiarse para quitar el hielo y escarcha que haya podido formarse. Para hacerlo, lo primero que debe hacerse es desconectarlo de la luz y dejar que se vaya descongelando. Es importante no usar cuchillos u otros utensilios rascadores de hielo, pues se podrían dañar las paredes. Los alimentos congelados se guardarán en la nevera el mínimo tiempo posible. Los cajones se sacarán y se lavarán con agua tibia y jabón. El interior también se frotará con una bayeta humedecida con agua y jabón, prestando especial atención a las gomas. Aprovecharemos la limpieza del congelador para descartar aquellos alimentos que haga mucho tiempo que se guardan congelados.


Las estrellas del congelador


Cada congelador tiene una capacidad determinada, que viene indicada con el número de estrellas del aparato. Cada estrella indica -6 ºC.


Teniendo en cuenta que la congelación en el ámbito doméstico debe realizarse a -18 ºC, el electrodoméstico deberá contar al menos con tres estrellas, que son el número que permiten una congelación a unas condiciones adecuadas. Un congelador de cuatro estrellas garantiza una temperatura de -24 ºC, que permite que la congelación se realice sin riesgo sanitario.


Artículo escrito por Marta Chavarrías. 
Publicado en Eroski Consumer en Mar. 19, 2014. 

miércoles, 5 de marzo de 2014

El vinagre ¿Desinfectante económico y efectivo?


Recientemente, el 27 de febrero del presente año, salió publicado en la página healthfinder.gov (HealthDay News) un artículo en el que se establece que, según una investigación reciente, el vinagre, una sustancia que conseguimos en la mayor parte de las despensas de las cocinas de nuestros hogares y la cual usamos para sazonar algunos alimentos, puede ser un arma poderosa contra bacterias peligrosas, como es la Mycobacterium tuberculosis.

Si bien se ha establecido el uso del cloro como el desinfectante a utilizar para eliminar la bacteria de la tuberculosis (TB) de las superficies, los autores del referido estudio señalaron que el mismo no sólo es tóxico sino también corrosivo. Por otra parte, otros desinfectantes podrían ser excesivamente costosos para los laboratorios de TB en los países de bajos recursos en los que usualmente se presenta la enfermedad.

En este sentido, los científicos señalan que el ácido acético, ingrediente activo del “vinagre común”, podría convertirse una manera económica, efectiva y no tóxica de eliminar a estas micobacterias, las cuales se han ido tornando cada vez más resistentes a los fármacos.

El principal autor del estudio es Howard Takiff, quien trabaja en el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC) ubicado aquí en Caracas - Venezuela; el mismo indicó en un comunicado de prensa que realizó la Sociedad Americana de Microbiología (American Society of Microbiology) que "…las micobacterias provocan tuberculosis y lepra, pero las micobacterias que no son TB son comunes en el ambiente, incluso en el agua corriente, y son resistentes a los desinfectantes de uso común". Y añadió, que "cuando contaminan los lugares en que se realizan cirugías o procedimientos cosméticos, pueden provocar infecciones graves", "son innatamente resistentes a la mayoría de los antibióticos, requieren meses de terapia y pueden dejar cicatrices que deforman".

El especialista expuso además, que el peligro es principalmente elevado en los países con menos recursos, explicando que "muchos procedimientos cosméticos se realizan fuera del ámbito hospitalario en los países en desarrollo, donde no hay desinfectantes efectivos disponibles". "Estas bacterias son patógenos emergentes. ¿Cómo nos deshacemos de ellas?".

El equipo de de investigación de Takiff hizo el descubrimiento de manera accidental mientras evaluaba un fármaco que debía disolverse en ácido acético; en el frasco en el que sólo había ácido acético, sin el fármaco, se observó que las bacterias seguían siendo eliminadas.

Luego de esto, se evaluaron diferentes concentraciones de ácido acético en relación con distintas duraciones de la exposición, hallando que aquellas cepas de tuberculosis sometidas a una solución de ácido acético del seis (6) por ciento, se redujeron a niveles indetectables luego de treinta (30) minutos de exposición; incluyendo las cepas resistentes a la mayoría de antibióticos. La concentración utilizada es un poco más elevada que la que posee el vinagre estándar. Este trabajo investigativo lo realizaron con el apoyo de científicos del Colegio de Medicina Albert Einstein ubicado en la ciudad de Nueva York.

Entretanto, Takiff también valoró qué tan efectivo era el ácido acético frente a la Mycobacterium abscessus, una de las cepas de micobacteria no TB más resistente a los fármacos. Esta investigación, la cual tuvo lugar en Francia, evidenció que una solución más concentrada del diez (10) por ciento de ácido acético, luego de treinta (30) minutos de exposición, fue suficiente para eliminar de manera efectiva al microorganismo. “Esa solución siguió siendo efectiva cuando añadieron proteína de albúmina y glóbulos rojos para imitar lo que podría suceder en ámbitos reales de atención de salud”, señala el artículo.

En lo que respecta a la seguridad del uso de este ácido, se estableció mediante un estudio publicado en la edición en línea de la revista mBio con fecha del 25 de febrero, que inclusive una solución de ácido acético del veinticinco (25) por ciento llega a actuar únicamente como un irritante menor, “y que 100 dólares podría comprar suficiente de este ingrediente como para desinfectar hasta cinco galones de cultivos o muestras clínicas de tuberculosis”. Por lo que se puede indicar como un producto seguro de usar.

Al respecto, Takiff indicó que "hay una necesidad real de desinfectantes menos tóxicos y menos caros que puedan eliminar a las micobacterias TB y no TB, sobre todo en los países con pocos recursos".

No obstante, señaló que "por ahora esto es simplemente una observación interesante", "…todavía está por determinarse si podría resultar útil en la clínica o en los laboratorios de micobacterias para esterilizar el equipo médico o para desinfectar los cultivos o los especímenes clínicos".

Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com

© Derechos de autor 2014, HealthDay

FUENTE: American Society for Microbiology, news release, Feb. 25, 2014

domingo, 2 de marzo de 2014

Bacterias, no tan malas como las pintan (Cierta Ciencia)



Desde los inicios de la civilización, los demonios de las plagas y las pestes atemorizaron sin piedad a la humanidad. Los avances en los controles sanitariosque ocuparon buena parte de la historia médicay el uso de los antibióticos lograron aplacar el miedo, frenando y controlando los ataques de los microorganismos

Sin embargo, en esta guerra contra los microbios ha habido un manejo poco cuidadoso porque no se ha tenido una medida precisa de cuánto daño colateral se puede ocasionar si se riegan antisépticos y bactericidas sin discriminación.


Ya Pasteur había advertido sobre los riesgos de los ataques frontales a las bacterias pues consideraba que la vida sin ciertos gérmenes acarreaba peligros. 



“Desde un punto de vista evolutivo, las bacterias siempre estarán en ventaja” 

Dice Joshua Lederberg, premio Nobel y descubridor del mecanismo mediante el cual los microbios intercambian información genética. “Las bacterias pueden reproducirse y evolucionar un millón de veces más rápido que nosotros”, agrega. 




A ellas no les interesa con quien intercambian información genética o de quien toman los genes que les sirven con tal de evadir el ataque de los antibióticos.







Los humanos no podemos vivir sin las bacterias


Las bacterias no pueden vivir sin los humanos, y éstos sin ellas. El microbio que mata a su hospedero se está suicidando. 

Cuando ocurre el ataque con antibióticos las bacterias utilizan mecanismos de selección: 
si queda una pequeña población que no ha sido aniquilada, después de un período de latencia puede volver a atacar, esta vez inmune ya al antibiótico. 
Pura evolución y una historia bien conocida por los médicos, quienes advierten que cuando se inicia un tratamiento hay que finalizarlo.

En el organismo de los humanos existen diez (10) veces más bacterias que células y gracias a los estudios en los laboratorios usando técnicas de ADN, el número está creciendo de manera acelerada. Nuestro microbioma. Sólo en la boca hay entre 500 a 1000 especies y a medida que se estudien más personas, mayor será el número. La boca constituye un ecosistema que a su vez se subdivide en regiones como la lengua, las encías, los dientes. Incluso un diente, en cada uno de sus lados, tiene una combinación diferente de especies.



El microbioma


Los científicos están descubriendo ecosistemas en órganos donde se suponía no existían; los pulmones eran considerados estériles hasta que se encontraron 128 especies de bacterias. Cada centímetro cuadrado de nuestros pulmones alberga dos mil microbios.

Algunos microbios sólo pueden sobrevivir en una parte del cuerpo mientras otros son más cosmopolitas. Y las especies encontradas en una persona no son las mismas que las de otra. Sólo el 17% de las bacterias que tiene una persona en la mano derecha está en la izquierda. Toda esta variación indica que el número de genes de lo que se llama el microbioma humano puede ser colosal. Investigadores chinos y europeos han calculado que el número puede estar cerca de los tres (3) millones.

La variación en nuestro microbioma se inicia en el momento del nacimiento. El bebé viene de un ambiente estéril pero al momento de pasar por el conducto vaginal se impregna de los microbios de la madre. Los bebés que nacen por cesárea, en principio estériles, rápidamente reciben, como si fueran imanes, microbios en su piel. El proceso de colonización seguirá durante toda la vida de las personas.

El microbioma en el cuerpo cumple múltiples funciones. Además de participar en la digestión los microbios ayudan en muchas formas. Los de la nariz, por poner sólo un ejemplo, fabrican antibióticos que matan los patógenos dañinos que se aspiran.

Un sistema inmune hecho a la medida de las bacterias


Para coexistir con el microbioma, el sistema inmunológico tiene que aprender a tolerar cientos de especies no dañinas, mientras ataca a los patógenos. Los científicos están encontrando que es el mismo microbioma quien guía al sistema inmunológico en la búsqueda del equilibrio. El sistema inmunológico utiliza la inflamación para atacar a los patógenos. Pero como demasiada inflamación puede ser dañina, existen moléculas que envían señales para reducirla; si esas señales fallan, el resultado puede ocasionar un desequilibrio que acaba en enfermedad.

El sistema inmunológico aprende a diferenciar entre los microbios dañinos y los que son beneficiosos para el organismo, estableciendo un equilibrio entre los buenos y los malos. 


Cuando a los niños se los priva de su fuente normal de microbios sus sistemas inmunológicos reciben una educación precaria; así, las células inmunológicas “ignorantes” disparan señales de inflamación tan fuertes que acaban destruyendo las células normales y sanas. 


El asma y las enfermedades autoinmunes son más comunes en los países con medidas exageradas de asepsia, pues sus niños crecen lejos de cualquier contacto con el campo y los beneficios de tener cerca animales, plantas y suelos llenos de microbios.


Bacterias que curan


Un buen conocimiento del microbioma les está dando a los científicos una nueva manera de pelear contra las enfermedades. Durante más de un siglo habían estado buscando la manera de tratar a los pacientes con bacterias benéficas. Parece que al final se están logrando resultados. 

En el año 2008 un gastroenterólogo de la Universidad de Minnesota inició el tratamiento de una mujer que, con una grave enfermedad intestinal sin explicación y habiendo perdido 30 kilos en 6 meses estaba al borde de la muerte. El investigador extrajo y seleccionó microbios de las heces del esposo y los inoculó en el intestino de la mujer. La mejoría fue inmediata. Burdo como parece el método, ya ha sido adoptado por otros científicos de diversos laboratorios del mundo, con muy buenos resultados, sobre todo en casos difíciles de diarreas infantiles.


Los microbios han estado en este planeta mucho antes que el hombre y con seguridad seguirán habitándolo cuando éste haya desaparecido. Han colonizado todos los hábitats imaginables demostrando un éxito evolutivo asombroso.

Mejor estar en buenas relaciones con ellos.

Si se exageran las medidas de limpieza los buenos microbios se perderán y con ellos los beneficios de esa simbiosis que ha acompañado al hombre desde su origen.


sábado, 1 de marzo de 2014

Universidad Central de Venezuela (UCV) Patrimonio Mundial de la Humanidad

   


 ¡Bueno días lectores!


El día de hoy no pude evitar querer compartir esto videos sobre la gloriosa ¡UUUCV..!



Creo que es una manera de recordar lo que es nuestro campus universitario y lo que este ha representado para el mundo. Sobre todo en esta época tan difícil que está atravesando mi país, Venezuela, y en especial nuestros estudiantes.


¡No dejemos que muera nuestra Ciudad Universitaria! 


¡No dejemos que muera la casa que vence la sombra


Espero se sientan tan orgullosos como yo de mi alma máter. 


¡Feliz día!








Himno de la UCV

Letra: Luis Pastori y Tomás Alfaro Calatrava
Música: Evencio Castellanos




CORO

Campesino que estás en la tierra,
marinero que estás en el mar,
miliciano que vas a la guerra
con un canto infinito de paz,
nuestro mundo de azules boínas
os invita su voz a escuchar:
empujad hacia el alma la vida
en mensaje de marcha triunfal.

I

Esta casa que vence la sombra
con su lumbre de fiel claridad,
hoy se pone su traje de moza
y se adorna con brisa de mar.

II

Para el sueño encendido de Vargas
laboremos azul colmenar
mientras mide el perfil de la patria
con su exacto compás, Cajigal!

III

Libre viento que ronda y agita
con antiguo, desnudo clamor:
nuestra sangre de gesta cumplida,
nuestras manos tendidas al sol!

IV

Alma Mater, abierto Cabildo,
donde el pueblo redime su voz:
Nuestro pueblo de amable destino,
como el tuyo, empinado hacia Dios!